martes, 28 de febrero de 2012
El Aprendiz, Capitulo 26
Hola, hermosas.
Perdón la demora de la actualización de
esta historia. He de decirle
se debió a un bloqueo
mental, falta de tiempo por el trabajo y si en parte
por desmotivaciones y pensamientos locos que llenaron mi mente en los
últimos meses, muchas cosas que
al final quisieron rebasarme y
casi logran llevarme lejos de lo que me
gusta y genera pasión en mi.
Por eso he de agradecer a unas personas
por su apoyo, sus palabras, y los
consejos, a mi Johanna, doctora pervertida
gracias por todas las sugerencias y la lluvia de ideas que
al final generaron una tormenta.
A mi Sarri y mi Jes
mis coterráneas y amigas, por
oírme y dar
sus opiniones en silencio y
a toda voz, y a mi gatita Estefanía
por no dejar de estar a mi lado.
También
he de agradece a todas
y cada unas de Uds.
por seguir con nosotras a pesar de
todo, a las que comentan y a las
que no. Confieso que si
no fuera por los comentarios y el apoyo de
todos hubiese hace meses cerrado esta etapa, pero hoy
con la mente clara, aquí estoy.
El final de esta historia, pero ojo
que traeré uno o dos Out-take.
Ah y Teles me
robe un poco a tu Isabella Afterhours… gracias
hermosas. Ada
La parafernalia desplegada
entorno de nuestra fecha
especial me estaban haciendo replantearme la idea del matrimonio, por lo menos
la primera semana, en ese momento quise
haber volado con Sheep al
sur, quizás inventar un
viaje de última hora a
Hawái o
Japón, quizás Marte.
—¡Emmett!—
regaño Alice, entornando los ojos—
despierta, tenemos que ir
a la panadería—
Le mire
con cara de pocos amigos. Tras
el anuncio del compromiso
poco había visto
a Rose, sin contar ese domingo en
casa de Edward, desde
esa noche parecía que a mi novia le habían llevado a una torre para
que su
gallardo caballero no le encontrara y pervirtiera
Acalle
la respuesta lista que
picaba en mis labios, no me convenía
cabrear a doña hormonas
—¿No
debe la novia estar
al tanto de la boda y no el
novio?— pregunte con fingida inocencia— yo debería
aprovechar de mis últimos días de soltería, no se ir
de me juerga con mis amigos, ver a una
stripper— podía haber seguido
enumerando una a una las cosas que podía hacer
—Hombres—
farfullo, sin mirarle podía sentir
sobre mi mirada enfadada
A mediados de semana me
escondí como un chiquillo en la casa de Edward, mi hermano no tardo en
burlarse de mi o extenderle las
noticias a sheep, quien
no demoro más que Edward en usar
la información para burlarse
—Que los jodan— le
gruñí a ella por teléfono a
él en directo
—Eso espero—
respondió la sabionda
Edward
solo se rió,
arrebatándome el móvil para hablar con su mujercita… mierda si me sentía celos,
frustrado, enfadado. Rose, ni siquiera
pasaba más de cinco minutos al teléfono porque según
ella “tenía muchas cosas pendientes”
El jueves y viernes me la pase pegado a la laptop en
video conferencia con Marissa
—
¿Vendrás a la boda?—
pregunte el jueves a primera hora—
será tu oportunidad para ver a Sheep como una fémina— le prometí, lo
cual produjo carcajadas
—
¡Imposible! la única vez que le vi con algo de ropa femenina
fue cuando tuvo esa entrevista
con la trabajadora social, no siquiera para las reuniones importantes
se viste más delicada—
—Es
la madrina, dama de
honor o como quieras llamarla,
además Rose no le permitirá que incordie
con la ceremonia, mi hermana
es una obsesa de la moda y para
no enfrentarse a ella
lo hará. Créeme, Isabella Swan
se vestirá como una damita—
Las primeras horas nos entretuvimos bromeando
a costa de Sheep. Las
siguientes horas y
gran parte del viernes no dedicamos de lleno a todo lo referente a
nuestro negocio. Si, bien había
prometido a Sheep mantenerme, no estaba
del todo seguro de poder seguir con el ritmo, menos cuando
en unos meses
iniciaría mi profesión de
entrenador,, o cuando las dudas asaltaban mi mente y temí fallar.
—Pues...
— murmure al
final de la tarde del viernes—
aun no lo hemos hablado a profundidad
con Isabella pero, creo
que lo más correcto sería
preguntarte desde ya ¿te gustaría
ser nuestra socia?
sabes que me quedare a vivir en
Seattle, pronto emperezare
una nueva etapa tanto laboral
como profesional, eso no quiere
decir que lo que
hacemos no me guste… solo… bueno yo no creo disponer de tanto tiempo como
antes, ya no podre viajar
tan seguido. El futuro de Isabella
es aún incierto, pero debemos tener
en cuenta que ella no está sola,
ahora tiene a los niños y está en una
relación y aunque ella no lo acepté más tarde que temprano se vendrá a vivir a Seattle—
—
¿En verdad?— pregunto entre sorprendida y
aturdida
—Si—
afirme sin dejar
lugar a ningún tipo de duda—
sabes lo importante que es el negocio
para nosotros, es
como el vinculo que fortaleció nuestra amistad y
a pesar de todos los cambios que estamos
teniendo aun no nos sentimos preparados para dejarle— pase
mis manos sobre mi cabeza, note dos cosas. Uno me sentía dividido y
dos ya era hora de ir al peluquero— pero somos consientes que no
podemos solos. Puedes pensarlo con calma—
—Lo
hare jefecito, lo hare. Ahora me despido quiero llegar
a casa y poner mis pies en lo alto.
Nos vemos la próxima semana. ¡AH!
Y pórtate bien—
rió a la vez que me enviaba un beso por la
maldita cámara
El sábado a primera hora,
desperté, no por gusto. Edward,
revolvía todo en el apartamento,
pareciendo una gallina clueca, hasta
cuchicheaba para sí y medio
barrió.
—La
gente normal, duerme hasta que el
ombligo se les para los fines de semana—
me queje
—Pues
la gente normal se despierta temprano si tiene cosas
importantes por hacer—
—¿Cómo?—
pregunte alargando las palabras, al tiempo que
rascaba mi pecho desnudo
—Bella
y los niños llegan sobre el mediodía y la casa esta desordenada—chillo exasperado
—
Evita hacer demasiado ruido. Quiero
dormir— me asegure de pronunciar la
última frase y echar a
correr antes que me lanzara el primero
objeto que tuviera al alcance
Por supuesto no pude dormir más. De
ello se aseguro mi querido hermano quien
me vio cara de mucama y me ordeno ayudar en su tare, para cuando
fue la hora de que se marchara
faltaba lavar los baños y
arreglar el cuarto de los niños
—Que
Rose no se entere, o me querrá fregando
los pisos todos los días—
masculle cuando terminaba mi tarea—
mejor aun que Edward no se vaya de bocazas, no quiero
que por culpa de Sheep medio país
se entere—
Al menos la llegada de Bella tuvo algo
significativo. La aparición de Rose
—Pensaba
que eras una utopía creada por mi mente—
susurre cuando mis brazos apresaron su cintura y le
acercaron a mi cuerpo. Sin esperar a su
respuesta o que rodara los ojos,
porque conociendo a mi mujer lo haría sin pensarlo. tome sus labios en un fiero y busco beso, uno donde
mi lengua se hundió en
su boca hasta tocarle las
amígdalas, bueno esa fue la definición de Sheep del beso
—Paga
una habitación, estás dando un espectáculo
de quinta frente a mis
hijos— aseguro
haciendo sonrojar a Rose
—Dile a esa cosa que tienes por novio que te bese—
gruñí, antes de besar
de nuevo Rose—Te amo— susurre contra sus labios.
Olvidándome de lo demás
Cuando la situación requirió que me comportara como adulto y no
como un hormonal adulto que había pasado sin sexo por más de
una semana, le apremie para
marcharnos a la que iba a ser nuestra
casa
—Alice
y Esme
están allá, además quería hablar
con Bella— aseguro con su
normal frialdad
—Pero…—
me queje
—Usa
la mano— intervino Sheep, quien
por su cara ya había delegado el cuidado de los niños a Edward—otrora
te funcionaba— agrego con malicia.
Mejor
vivo y atormentado, que muerto y
devorado. Sin pensármelo me apunte
a hacer de canguro de los gemelos
mientras las mujeres se marchaban
a donde quiera Dios que fuera.
Cada
segundo al lado de esos dos pequeños me
hacia plantearme la idea de
aumentar mi futura familia. Una
semana y
será mi esposa. Unos meses y estará
embarazada. Pensé con suficiencia. Claro está, el
pensamiento se evaporaba como la niebla
cuando los niños se mostraban hoscos y exigentes.
—No
sabes en lo que te estás metiendo—
le dije a Edward cuando los dos
terremotitos quedaron fuera
de juego
—Como
si tu lo supieras—
porfió— a la menor falta
Rose te cortara las bolas— Sheep, es
una mala influencia. Me
dije al ver la atrevida respuesta del niño recto y educado de mi familia— y si está muy
furiosa quizás te las
haga tragar— se carcajeo.
—¿Es
que soy
su puto payaso o qué?—
brame— Ustedes dos me tienen hasta los huevos— le asegure
Mi reacción solo aumento su
risa, al punto que varias lágrimas se le
escaparon.
Esa noche cuando Rose y
Sheep, volvieron intente convéncela
de que se quedara en mi casa,
fallando desde todo punto de vista
—Estoy muy cansad, Osito—
El cansancio le duro
toda la semana. Mientras la
tradición dictaba que los días antes de la boda se realizaba un ensayo,
mi terca
prometida se negó a
hacer nada de aquello
—Es
a mi modo o no se hace nada—
refunfuño por teléfono— ve tú habla
con el cura, yo ya mi papel,
llego tarde, camino segura,
sonrió emocionada, te miro con
cara de borrego degollado y digo si,
luego te beso y lo demás es historia—
Así el
jueves un muy sonriente Edward y
yo, fuimos hablar con el cura quien a tampoco le
hizo gracia entenderse
con el novio y el padrino
—A
parte que no hacen el curso, solo
el novio se presenta— refunfuño. Si, mamá
había convencido al cura que bautizo y oficio todas las ceremonias requeridas de sus tres pequeños, para que
nos casara
Al
viernes por la noche mi desconcierto, la rabia y frustración estaban por pasarme factura, mil preguntas se agolpaban en mi
frente.
¿Y si no
funcionan las cosas? ¿y si solo
lo hace para devolverme lo que
le hice con anterioridad?¿y si me da
calabazas?
Mi
dilema interno fue interrumpido
cuando la puerta sonó como si alguien le diera de patadas. Los golpes siguieron hasta que me obligaron a
dejar mi cómoda cama. Me importo una
madre ir
solo en bóxer, como buen novio
tenía que descansar, a quien engaño por ordenes
envuelta en petición decente de
Rose
—
¡Wow!— silbo
Sheep— estas para comerte todo—
para reforzar la idea se lamio el labio
en un gesto que me pareció
grotesco y ofensivo. así deben
sentirse las mujeres cuando se les ve como si fueran comida
—Isabella—
—Espera, cariño
quiero ver todo este cuerpito
por completo antes que sea
propiedad privada y pongan el letrero de perros rabiosos. Date la
vuelta que quiero ver ese trasero duro y redondo—
ronroneo— Mmmm blanco… lo he dicho nada como un buen bóxer blanco que
marque los atributos masculinos y ¡Zas! mi imaginación despierta— Mis
mejillas ardieron ante el escrutinio descarado de mi amiga, mis ojos no se separaron de la cara de mi
hermano que de relajado paso
a verde de la ira y roja
de celos—Se buenito y sácate ese bóxer para ver si lo que hay debajo es de verdad—
—
¡Isabella!—chillamos al unisonó alarmados y
enfadados los dos.
—Recuerda
que soy tu novio—
mascullo entre dientes Edward sin apartar
sus ojos de los míos
—Pero
por eso no estoy ciega.
Además así llego a
casa con ganas de…— podía sentir sus
ojos recorriéndome de cabo
a rabo—sabes que a Emmett nunca se le paro conmigo—
—
¿Qué demonios hacen aquí?—gruñí
—Pues venimos a buscarte para ir a celebrar la última noche de soltería del Indomable y
empedernido Emmett Cullen—
—No. Prometí
ser un boy scout—
—Ni en tus
sueños, ya está todo preparado—
hablo Edward aun tenso—
pero, primero haz el favor y
cámbiate antes que mi novia
haga un rio con tanta baba
que se le escurre—
—Fácil—
atajo Sheep, mirando por encima del
hombro a mi hermano— quítate la ropa y así
babeo también por ti. Y
en cuanto a ti, con ropa o sin ella vas
con nosotros—
—¿Desde cuándo
una mujer está invitada a una
despedida de soltero?— pregunte hosco
—Desde
que quiero, pueda y no me da miedo— respondió ella
sabionda y petulante.
Antes de que nos diéramos
cuenta la muy
perra hinco sus dientes en un costado de mi estomago
haciéndome gritar y a ella
reír— mueve ese
prieto cuerpo, guapo o te
aseguro que ese mordisco será placentero si llegamos tarde a tu despedida—
Deje
a mi hermano reprendiendo a su salvaje novia. Una
novia quien por cierto reír a carcajadas.
Media
hora más tarde, un Edward aun
furioso conducía en perpetuo silencio,
mientras una parlanchina Sheep estaba
por sacarme de quicio en la
parte de atrás del auto.
Una
hora después nos detuvimos en
un hotel, primero les mire con cara de pocos amigos
y luego con preocupación. Sin
saber que tramaban y con la mente de
Sheep, cualquier cosa podía suceder.
—Vamos, vamos, muévanse—
Sin importarle si le seguíamos o no,
brinco del auto y corrió al
hotel, si aprecia que la
fiesta y la diversión fueran en
su honor.
—
A la próxima asegura de estar
presentable al abrir la puerta—
gruño Edward antes de entrar al hotel
De Sheep, ni el resto quedaba. Subimos silenciosos al ascensor, hasta el último piso, y la
ultima habitación-Suite-. Al
entrar me sorprendió ver a Jasper y mi padre sentados
oyendo a Sheep contar lo sucedido sin reparo alguno, a ellos
pareció hacerles gracias
su impertinencia e imprudencia
pues le celebraban cada cosa con fuertes
risas
—
Sheep, ¿Cuándo te vas?—
inquirí mordaz
—mmmm…
¿cuando me de la regalada gana?— sin dejar de
parlotear con Jasper y mi padre se
dedico a servir trago, dejo sobre la mesa las pequeñas copas llenas de tequila blanco, bordeada con sal y
a su lado un limón
con picante—¡por Emmett!— brindo en solitario,
bebiéndose de un solo golpe
su copa
Dos
tragos más
tarde, Sheep insistió en querer hablar
conmigo en privado. Edward, parecía querer matarme
—Isabella—
le advirtió
—
¿Si? Edward—
pregunto ella con fingida inocencia— es mi regalo de despedida para mi mejor amigo— le frunció el ceño
Con la cabeza en alto, y
paso firme me condujo a la
habitación contigua. Solo encendió una luz
y le dejo tan bajo que poco se veía,
mientras me acostumbraba a la
oscuridad, palmeo mi hombro
—Te esperamos—
con eso cerró la puerta
El sonido de
instrumentos me hizo brincar. Retrocedí para encender por completo la luz, entrecerré los ojos, al
abrirlos me encontré con una habitación casi desnuda, solo un sillón y un enorme
pastel blanco con rojo burdeos
y un letrero
de ¡Disfruta de tu última noche!
le llenaban
Antes
de poder retroceder una sensual voz
se hizo sonar, cantando “Why
don´t you do
rigth”.
y la cubierta superior del
pastel se abrió, con el
primer crescendo de la música los
brazos y una cabellera
rubia se vio. El corazón
parecía apunto de salírseme,
si Rose se enteraba
me mataría.
Lentamente
fue saliendo el cuerpo de
espalda, dejándome ver y
contemplar una mujer de cabello rubio
liso con bragas de encaje
negro y sensual como una prenda
de vestir, contorneándose deliberadamente
. Con el final de la canción la
mujer giro sonriéndome
ampliamente
—Mierda—
exclame anonadado. Avance
seguro y motivado le ayude a dejar el
estúpido pastel.
Sus labios
se unieron en un caliente pero corto beso.
Mis
ojos descendieron y descendieron solo para verse
atrapado por mas delicioso y tentador encaje
negro.
Quería
aullar de placer y llorar de
frustración, si no podía
obtener un poco de ese cuerpo
—Siéntate—ordeno bajo pero
firmemente— no puedes tocar— advirtió antes de
acercarse— dicen que mañana es tu
día especial y debo ser
buena por ser tu última
noche de soltería— ronroneo
pasando una de sus largas
uñas sobre un lado de mi rostro—
no toques— musito besándome fugazmente
Su
cuerpo volvió a contornearse
bajo la voz y la percusión de “I just wanna make love to you”. sus
manos se movieron de su
cuello a su cabeza lenta y
sinuosamente, su cadera parecía
un péndulo hipnotizándome,
lentamente bajo dejando sus senos frente
a mis ojos, acercándose y
alejándose lo suficiente para hace un
giro raro y dejar su
espectacular trasero frete a mí.
Mis manos picaban por tocarle, y picaron
mas cuando lo movió y se inclino dejándolo alto.
Sin la menor, seguí cada movimiento de su cuerpo. No
temí ponerse entre mis piernas y sentarse
en mi regazo, y fritar
su caliente cuerpo contra el mío. Mi respiración estaba por colapsar pero no me importaba con
tal de ver ese cuerpo
tentándome a pecar. cuando la
voz de la cántate aumentó
se dejo caer de tal forma que
su cabello se arrastro por el piso pero ello no le impidió
seguir moviéndose en contra de mi dolorosa erección,
se levanto rápido que pensé haberme
imaginado ese movimiento.
Sacudió el cabello y me sonrió,
con parsimonia se levanto
solo, para poner uno de sus
pies cubierto por unos
malditos zapatos altos en mi
pierna, clavando el tacón sin
misericordia. con el cambio de la
canción cambio el movimiento, haciéndoles
más marcados y lentos,
mas seductores y
torturadores.
—¡Por Dios!—
exclame al verle sacarse
el encaje que cubría sus
brazos a medida que Etta,
gritaba en “Something´s got a hold on me”.
Sus ojos y la sonrisa
ladina me hicieron seguir
hasta la unión de sus pechos, con un lento movimiento
abrió el broche,
con el aumento del ritmo se saco
el sostén, sin dejar de moverse
provocadoramente. Lo mismo sucedió con sus bragas, desaparecieron con movimiento salidos
de quien sabe Dios. Volvió
a sentarse en mi regazo
frotándose con gusto, pasando sus manos por mi rostro
y pecho, incluso provocando mi dolida erección.
—Estoy
caliente— ronroneo chupando mi lóbulo, llevándome al límite con
esa irrespetuosa y aterciopelada lengua que
recorrió lo que quiso a su
arbitrio— Si me tocas
podrás ver lo húmeda que estoy— su
voz sonó como un lánguido gemido , uno que precede al
orgasmo.
Su boca me beso como parte final de su
acto
—Nos veremos
pronto cariño— prometió,
levantándose dejándome más caliente que el infierno y más dolido
que si me hubiesen clavado agujas
—
¡No!— chille
—Solo
me pagaron para un baile— musito sin
dejar de lado su labor de
volver a ponerse las pocas prendas que antes había
descartado. No sabía que era más
malévolo que se hubiese desnudado
y bailado frente a mi o que se
vistiera tan despacio
y sin pizca de alteración. Sus labios
fueron humedecidos por la misma
lengua que jugueteó en mi cuerpo
—Rose—
susurre dolido
—Un
baile, Osito, un baile—
se acerco para volver a besarme— nos
vemos mañana futuro señor
Cullen— aturdido le vi caminar
al baño y regresar abrochándose
un abrigo que cubría
todo su hermoso cuerpo— Disfruta
de tu despedida de soltero, yo ya disfrute la mía— para colmo, se
rio y sonrojo como
una virgen— te amo—
Tarde
en volver con los demás , hasta
que mi cuerpo no volvió a
la normalidad, o lo intento
porque la imagen de Rose y su
baile no se desaparecería nunca.
No me extraño que volver Sheep
me sirviera una copa de tequila sin sal, ni
limón o picante, o que
Madonna sonara en la
televisión
Edward,
Jasper y mi padre estaba sentado
freten a una mesa redonda
impacientes por lo que pude observar
—Vamos—
dijo indicando la mesa— hoy
te dejare ganar— solo
entonces me fije en las cartas que sostenía en una de sus manos— hoy
el premio un auto—anuncio sentándose
y mostrando sus habilidades
barajando las cartas—
como no hay casa lo
haremos así, seré
su cupiere. Vamos a
Cinco, si gano más de
dos. Ustedes señores míos
me darán el auto que yo quiera—
Las
cartas se repartieron, cada
uno hizo su movimiento. Segundo a segundo la tensión
fue en aumento, pero nadie se
atrevía a moverse. Las horas pasaron, entre gruñidos,
risas socarronas, faroles y palabras
soeces siseadas, entre
jubilosas expresiones y algunas maldiciones. Lo que iba a
unas horas de distracción
terminaron por ser horas de
tensión, de pasión.
La
quinta y última
ronda termino cerca de las ocho de la mañana, con una Bella
sonriente que si no la conociera con
anterioridad podía decir que
era una jugadora
profesional. Toda la
baraja revuelta y tres
rostros masculinos totalmente
contrariados
—Han
de ser buenos perdedores—
declaró insolente— tú, tú, tú
y tú— dijo indicando a cada uno—se pondrán de acuerdo para darme mi permio, y
que conste gane limpiamente— las palabras que negaban
su declararon cayeron en
vacio— he de agradecer
a Pokerstars. com y mis
largas noches de insomnio,
a mi inteligencia y su imprudencia
e incredulidad por este rotundo triunfo que, no se diga que las mujeres solo
somos buenas para la cocina y criar
niños. Hablando de niños, mujeres
y cocina, si no quieren que les corten las bolas
a todos, con excepción de mí Edward, surgieron que vayan duerman unas
horas y se preparasen para la boda—
antes de poder abandonar la habitación fuimos testigos del beso y
el abrazo que Sheep
diera a mi hermano— te dije
que tendría un
auto nuevo antes que Emmett se casara, ya sabes cual
quiero así que asegúrate de
traerlo a casa pronto—
Pasado el mediodía el teléfono me despertó, lo ignore las
dos primeras veces
a la tercera lo mande
contra el piso, a la cuarta y con
el ceño fruncido y ojos cerrados me
las arregle para tomarlo y
a la quinta vez, conteste al estilo
ogro endemoniado
—Si—
—Eres tan condenadamente caliente cuando estas gruñón—
ronroneo Bella— eso o como los demás miembros de tu familia aun están
sentidos porque una mujer les desplumo— rio
—
¿No tienes nada por hacer? ¿Cambiar pañales?¿torturar al imbécil de mi hermano?¿pelear como gatas con
mi hermana?—
Un
suspiro exageradamente
sentido reverbero por la línea—No, no
y no, Edward y la canguro se las llevan bien con ellos, además, como madrina
tengo que asegurarme de ser tu dolor de culo personal, así que levanta
tu feo trasero, báñate que hasta aquí
huele a hediondo y arréglate Edward pasara por ti, recuerda
es tu boda—
Obedecí las
ordenes de mi amiga, los
nervios que horas antes
no estaban comenzaron a alterarse. Tarde más
de dos horas en ponerme el maldito traje.
Edward, se mantuvo
en completo silencio, poco
me importaba enfrascarme en
una absurda discusión con mi
hermano por lo de la noche anterior, conociéndole sabía
que estaba aun histérico
y enfurruñado y no valía Sheep y
sus artimañas amatorias.
Los pocos invitados a nuestra boda
ya estaban arribando, por lo menos eso aprecie mientras
ingresábamos por el camino
de tierra.
—Llegan tarde— riño
Alice— Rose está
en su sesión fotografía y… ¡qué cara tienen!— chillo— el colmo que todos
tenga cara de perros apaleados,
se suponía que no se excederían en
tragos que, se portarían correctamente
pero ¡no! Y se suponía que
esa mujer estaría para cerciorarse—
—No
tomamos más que uno pocos tragos—
respondió tenso mi hermano
—No
la defiendas, esa mujer es una…—
—Una mujer completamente feliz y
que durmió plácidamente en brazos
de su novio—
la voz de Sheep, produjo en Edward una
sonrisa presumida. En Alice, una
mueca de fastidio, y en mi risa
—
¿Por qué parece que tú hubieses dormido
toda la noche?— me queje
—Porque
la belleza no se improvisa. Ahora
vamos en breve dará comienzo
la ceremonia—
Sheep, tiro de mi mano llevándome lejos de ella,
mierda, cuando lo único que deseaba
era envolver mis brazos en su cintura y
besarle con locura.
Quince más tarde, la
maldita marcha nupcial casi me provoca un
paro cardiaco. Primero mi
sobrino caminado elegantemente. De
brazo de mi padre y muy sonriente avanzaba mi
Rosita, seguida por una Sheep,
totalmente elegante y mi
ceñuda hermana.
Cada persona alrededor del pequeño
cenador se ubico en su
puesto, mi hermano y Jasper
a mi lado. Alice y Bella
a su lado. Mis padres cercan junto con un pajecito sonriente y
juguetón
Las pocas veces
que mis ojos se separaron del
emotivo rostro de Rosita, se
posaban en las otras mujeres importante de mi vida, todas ella, incluyendo
a mi amiga lloraba en silencio. Tuve que morderme el carrillo para no carcajearme ante la reacción
romántica de mi amiga.
Los
votos fueron entonados al unisonó,
solo variando algunas promesas individuales.
El si fue precedido de
una sonora risa de parte de Sheep.
El beso fue el más casto y puro que hubiese dado en mi vida. Nadie tiro
granos, solo algunos vítores y
abrazos
—No
sabía que llorabas en las bodas, Sheep—
me burle cuando salto a mi abrazándome
con fuerza— ¿Quién diría que eres
una romántica empedernida?—
—No
lo soy— aseguro— si llore, fue porqué creo que
pueden cometer un error—
—Ciertamente, es una romántica de cabo a rabo, si no mira qué libro lee cando nadie le ve—
aporto Edward tomando a su novia y
llevándole en dirección de mi
mujer
El brindis, el discurso de los padrinos, algunos amigos
no falto, tampoco
escaseó el alcohol, la comida, el pastel, la música
y las fotografías.
La liga se
sorteo y tuve
que aguantar una eternidad hasta que el afortunado le sacara con
los dientes de su
delicada pierna. El ramo cayó en manos e Marissa quien sonrojada
se unió al ganador de la liga para su baile
Nuestra noche de
bodas termino en la suite nupcial del Ritz,
como buen marido que era y pretendía ser desde
el coche y hasta la habitación le
lleve en vilo,
tal como la tradición manda. Bese
su cabeza, me embriagué con su aroma y me di
el gusto de verla por ultima vez
con su traje de novia, antes de empezar
lentamente a desnudarle.
No me sorprendió encontrarme con un conjuntito
parecido a la noche anterior, esta
vez blanco como las nubes. Un corpiño
sensual, una pequeña bragas
de delicado encaje y una liga en su
muslo izquierdo
—Emmett— su voz
un ronroneo cargado de promesas calientes
—Sra.
Cullen—
gruñí, tomándole en
brazos y depositándole en la cama
tome
el tiempo necesario para verle,
estudiarle, memorízale e
inmortalizarle en mi mente, alma
y cuerpo. Una marca para
toda la vida y otras si las hay.
Le bese
con sigilo, le toco con devoción le ame con toda mi pasión. Una
noche de bodas no era
suficiente para amarle como se debía.
Una vez fue
poco para todo lo que
deseaba hacerle. Por ello
me entregue completo a amarle en silencio, emborrachándome con sus movimientos, con sus gemidos, adorando el
olor que nuestros cuerpos generaban. Saciándome
de ella, y de
este amor. devorándole hasta que el
alba despuntó y mi
cuerpo cedió al placer que da
dormí con la persona que amas en brazos, creyendo en inmortalidad y seguridad. Teniendo en mente que cada día
trae una enseñanza y
que unos son los maestros, otros
los aprendices pero que al final
todo converge en un punto donde somos uno y
somos nada.
FIN
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Adita de mi corazón!
ResponderEliminarMenudo broche de oro para este fic, y esa foto de mi osito con traje de ceremonia...grrrr...totalmente comestible
Y el striptease de Rose...vistes que la llame por su nombre? casi me cae bien.
Y ya tienes ideas para los outtakes? que te parece la luna de miel, cuando nace su primer hijo, o mejor, una parejita de gemelos. Cuando están viejecitos los dos rodeados de su familia, algo así como el 25 aniversario.
Yo que sé!!!
Seguro que me sorprendes gratamente con lo que hagas, como siempre.
Besos.
Me encanto el final de esat historia!...
ResponderEliminarpobre Emmett como sufrio x no ver a Rose lo bueno fue q ella fue su personal stiptease y los 2 tuvieron una gran despedida de solteros,y esa shaep q mortifico al pobre de Edward y lo puso celoso con sus comentarios sobre Emmett q mala jaja,me gusto mucho este fic gracias Ada x continuar con ella y no abandonarla,saludos y nuevamente gracias!:)
que final tan espectacular para esta historia....me queda una nostalgia porque no vere mas a mi sheep....pero igual te felicito Adita....y mi idea fue genial!!!!
ResponderEliminarhahahahahahha
te amo...besotes
Ahhh me demore en leer esto siendo que era la primera en esperarlo. Llore me encanto el final y definitivamente ese baile me encanto quede plop como te habia comentado. Dios extrañare a Sheep pero estoy segura que la vere dando vueltas por ahi. uno nunca sabe xD miles de saludos mi adita gracias por tan grandiosa historia. gracias por tus hermosas palabras.
ResponderEliminarEspero lo proximo que quieres traerme a leer. miles de besos :D
GRACIAS ADA ME ALEGRA QUE TU MUSA INSPIRADORA HALLA CONSEGUIDO LLEGAR A TI DE NUEVO, YO AMO TUS HISTORIAS ME ENCANTA LEERLAS, ME APASIONO CON ELLAS, AH NO SABES CADA EMOCIÓN DE LOS PERSONAJES ES COMO SI FUERA PROPIA, YO SE QUE ES MUY LOCO QUIZÁ HAYA PERDIDO LA RAZÓN PERO BUENO SIEMPRE QUE SEA FELIZ NO IMPORTA, TODO TE LO DEBO A TI Y POR ESO DIGO GRACIAS, POR QUE NO NOS ABANDONASTE Y SIGO AL PIE DEL CAÑÓN.
ResponderEliminarEN LO QUE AL CAPITULO SE REFIERE ES MAGNIFICO ME ENCANTA COMO COGEN A EMMET PARA SUS BURLAS JA UNA AMISTAD ASI EN MI 19 AÑOS DE VIDA NUNCA LA HE TENIDO Y SABERLA REFLEJAR EN UNA HISTORIA NO ES FÁCIL TE FELICITO.
me encanto, lastima que se termino era una de mis historias favoritas
ResponderEliminarBueno antes que nada no habia tenido tiempo de dejarte mi comentario, pero dejame decirte que me supermegaencanto estuvo genial al igual que toda la historia, sin duda no olvidare a este Oso tan enamorado de su Rose y ni que decir de Sheep que siempre me hizo reir mucho con sus ocurrencias, Gracias Ada por darme la oportunidad de disfrutar de tan fabulosa historia,,,,,
ResponderEliminarBesos